RSS

martes, 30 de octubre de 2007

Mi cuerpo es una máquina infranqueable; lo que me pasa debe tener sentido biológico-psicológico, pero yo no sé de esas cosas*. Sucede que cuando tomo una decisión, no dudo ni un ápice, pero al parecer tanta seguridad es una apariencia, un súcubo en mi mente; mi cuerpo es el que reacciona, el que me demuestra su miedo con fiebres, hemorragias, calambres, jaquecas, espasmos, dolores de garganta.
Recuerdo una fecha, una hora y una dirección exacta allá lejos, en otra vida. Había una puerta cerrada (mal augurio) y caí al piso, era un malestar intenso, mi mente no dudaba, pero mi cuerpo gritaba que huya, que me aleje de ese sitio.
Es curioso, porque yo, además de ser marciana, porque nunca estoy con los pies sobre la tierra, también soy ladamadelabismo porque doy saltos al vacío cada vez que puedo y eso que le tengo pánico a las alturas y, además, no tengo fe.

*Para eso está el Gen Suicida

3 Ya que entraste aquí, ¡COMENTA, CABRÓN!:

Jorge dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Jorge dijo...

marciana y aire... complicado tener lo pies en la tierra así

Dar saltos al vacío sin fe... Joder, eso sí que es FE

Jorge dijo...

sueñas que te lleva el aire?